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Hermosa muñeca
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de talle gentil,
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trocito de cielo,
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capullo de abril.
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La misma que el poeta
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quisiera cantar
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tu esbelta silueta,
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tu gracia sin par;
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mas frente a tu imagen,
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que me hace soñar,
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prefiero adorarte,
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mirarte y callar;
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porque no hay palabras
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en mi confesión
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que expresa el ansia
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de mi corazón.
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¿Quién eres tú?
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¿Qué misterio hay en tu fascinación?
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¿Quién eres tú?
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¿Por qué a tu lado tiemblo de emoción?
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¿Quién eres tú?
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¿Una estrella que me ciega de esplendor?
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¿Quién eres tú?
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¡Para que yo muera por tu amor!
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Tu aliento es perfume,
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tu voz celestial
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caricias tus ojos,
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tu boca sensual.
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por eso al mirarte,
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lo que nunca amé.
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te quiero, te adoro,
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ya cuánto no sé...
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Quién dice que Venus
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es la perfección,
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no ha visto tu talle
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ni ha oído tu voz.
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¡Ah, si yo pudiera
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decírtelo a ti
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todo lo que siento
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desde que te ví!...
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